Web address of the page: https://www.medjugorje.ws/es/messages/highlight?find=la&page=15 
www.medjugorje.ws » Mensajes de Medjugorje » Mensajes de Medjugorje conteniendo 'la'

Mensajes de Medjugorje conteniendo 'la'

Total found: 747
La aparición, que duró 7 minutos, aconteció en la casa de Ivanka. Durante la aparición estuvo presente sólo la familia de Ivanka, su esposo y sus tres hijos. La Virgen dio el mensaje siguiente:
Queridos hijos, Yo me he presentado como la "Reina de la Paz". Los invito de nuevo a la paz, al ayuno y a la oración. Renueven la oración familiar y reciban mi bendición".
Ivanka nos dijo que la Virgen estaba feliz y que le habló sobre el sexto secreto.
¡Queridos hijos! No olviden que están sobre la tierra en camino hacia la eternidad y que vuestra morada está en los cielos. Por eso, hijitos, estén abiertos al amor de Dios y dejen el egoismo y el pecado. Que vuestra alegría sea únicamente el descubrir a Dios en la oración cotidiana. Por eso, aprovechen este tiempo y oren, oren, oren, y Dios está cerca de vosotros en la oración y a través de la oración.(Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Deseo compartir con ustedes mi gozo. En mi Corazón Inmaculado siento que son muchos los que se me han acercado y que llevan de una manera especial en sus corazones la victoria de mi Corazón Inmaculado, al orar y convertirse. Deseo agradecerles y alentarlos, para que con el amor y la fuerza del Espíritu Santo trabajen aún más para Dios y Su reino. Yo estoy con ustedes y los bendigo con mi bendición maternal. (Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Hoy los invito a abrirse a la oración. Que la oración se convierta en gozo para ustedes. Renueven la oración en sus familias, formen grupos de oración, y así, experimentarán el gozo en oración y comunión. Todos lo que oran y son miembros de grupos de oración, están abiertos a la voluntad de Dios en el corazón y testimonian gozosamente el amor de Dios. Yo estoy con ustedes y los llevo a todos en mi corazón y los bendigo con mi bendición materna. Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Hoy deseo abrir mi corazón materno a ustedes e invitarlos a todos a orar por mis intenciones. Deseo renovar con ustedes la oración e invitarlos al ayuno, el cual deseo ofrecer a mi Hijo Jesús por la llegada de un tiempo nuevo, un tiempo de primavera. En este año jubilar, muchos corazones se han abierto a mí y la Iglesia se renueva en el Espíritu. Me regocijo con ustedes y agradezco a Dios por este regalo, y a ustedes hijitos, los invito: oren, oren, oren, hasta que la oración se convierta en alegría para ustedes. (Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Hoy, cuando el cielo está de manera especial cerca de ustedes, los invito a la oración, para que a través de la oración pongan a Dios en el primer lugar. Hijitos, hoy estoy cerca de ustedes y bendigo a cada uno con mi bendición materna, para que tengan fuerza y amor para todas las personas que encuentren en su vida terrena y que puedan dar el amor de Dios. Me regocijo con ustedes y deseo decirles que vuestro hermano Slavko ha nacido al Cielo y que intercede por ustedes. (Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Hoy, cuando Dios me ha permitido estar con ustedes, con el Niño Jesús en brazos, me regocijo con ustedes y le doy gracias a Dios por todo lo que ha hecho en este año jubilar. Agradezco especialmente a Dios por todas las vocaciones de quienes han expresado un Sí pleno a Dios. Los bendigo a todos con mi bendición y la bendición de Jesús recién nacido. Oro por todos ustedes para que el gozo nazca en sus corazones a fin de que en alegría ustedes también sientan el gozo que yo tengo hoy. Les traigo en este niño al Salvador de sus corazones y a aquel que los llama a la santidad de vida. (Gracias por haber respondido a mi llamado!
La aparición comenzó a las 15,20 y duró 10 minutos. Nuestra Señora vino gozosa con el Niño Jesús en brazos. Bendijo a todos y dio un mensaje:
¡Queridos hijos! Hoy cuando Jesús ha nacido y con su nacimiento ha traído un inmenso gozo, amor y paz, de manera especial los invito a que digan su Sí a Jesús. Abran vuestros corazones para que Jesús entre en ellos, habite en ellos y empiece a actuar a través de ustedes. Sólo así podrán comprender la genuina hermosura del amor, del gozo y de la paz de Dios. Queridos hijos, regocíjense por el nacimiento de Jesús y oren por todos aquellos corazones que no se han abierto a Jesús, a fin de que Jesús pueda entrar en cada uno de sus corazones, pueda comenzar a actuar a través de ellos, y para que cada hombre sea un ejemplo de auténtico ser humano a través del cual Dios actúa.
¡Queridos hijos! Hoy los invito a renovar la oración y el ayuno, aún con mayor entusiasmo, hasta que la oración se convierta en alegría para ustedes. Hijitos, quien ora no teme el futuro, y quien ayuna no teme el mal. Les repito una vez más: únicamente con la oración y el ayuno pueden también detenerse las guerras; las guerras de vuestra incredulidad y de vuestro miedo por el futuro. Estoy con ustedes y les enseño hijitos: en Dios está vuestra paz y vuestra esperanza. Por eso acérquense a Dios y pónganlo en el primer lugar de vuestra vida. (Gracias por haber respondido a mi llamado!
La aparición comenzó a las 9.45 y duró 5 minutos. La vidente Mirjana dijo que la Virgen en sus palabras se notaba decidida. Bendijo a todos los presentes y dio el mensaje siguiente:
¡Queridos hijos! Hoy los invito al amor y a la misericordia. Den amor unos a otros como vuestro Dios les da a ustedes. Sean misericordiosos (pausa) - con el corazón. Hagan buenas obras no tardando demasiado en realizarlas. Cada acto misericordioso que sale del corazón los acerca a Mi Hijo.
¡Queridos hijos! Hoy también los invito a abrirse a la oración. Hijitos, viven en un tiempo en que Dios les da grandes gracias, y ustedes no saben aprovecharlas. Se preocupan de todo lo demás, menos del alma y de la vida espiritual. Despierten del sueño cansado de su alma y digan a Dios con todas sus fuerzas, Sí. Decídanse por la conversión y la santidad. Estoy con ustedes hijitos, y los invito a la perfección de su alma y de todo lo que hacen. Gracias por haber respondido a mi llamado!
Queridos hijos! También hoy, los invito a la oración. Hijitos, la oración hace milagros. Cuando ustedes estén cansados y enfermos y no saben cuál es el sentido de vuestra vida, tomad el rosario y orad, hasta que la oración llegue a ser para vosotros, un alegre encuentro con vuestro Salvador. Yo estoy con ustedes e intercedo y oro por vostros, hijitos.Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! En este tiempo de gracia los invito a la oración. Hijitos, trabajan mucho pero sin la bendición de Dios. Bendigan y busquen la sabiduría del Espíritu Santo para que los guíe en este tiempo, a fin de que comprendan y vivan en la gracia de este tiempo. Conviértanse, hijitos, y arrodíllense en el silencio de vuestro corazón. Pongan a Dios en el centro de vuestro ser, para que puedan en alegría testimoniar las bellezas que Dios les da continuamente en vuestra vida. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
Ivanka tuvo la aparición en presencia de su familia. Ivanka testimonió que la Virgen estaba contenta y que le habló acerca del futuro de la Iglesia, y le dio el siguiente mensaje:
¡Queridos ángeles! Gracias por sus oraciones porque a través de ellas se cumple mi plan. Por eso ángeles, oren, oren, oren, a fin de que mi plan se cumpla. Reciban mi bendición maternal.
¡Queridos hijos! En este tiempo de gracia, los invito a acercarse aún más a Dios a través de vuestra oración personal. Aprovechen el tiempo de reposo y den a vuestra alma y a vuestros ojos reposo en Dios. Encuentren en la naturaleza la paz y descubrirán a Dios Creador, a quien podrán agradecer por todas las creaturas, y entonces encontrarán el gozo en vuestro corazón. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Hoy, los invito a todos a decidirse por la santidad. Que para ustedes, hijiitos, la santidad esté siempre en primer lugar en vuestros pensamientos, en toda situación, en vuestro trabajo y en vuestras palabras. Así, vosotros también la pondréis en práctica poco a poco; paso a paso la oración y la decisión por la santidad entrarán en vuestra familia. Sean verdaderos con vosotros mismos y no se aten a las cosas materiales, sino a Dios. Y no olviden, hijitos, que vuestra vida es pasajera como una flor. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! También hoy los invito a la oración, especialmente hoy cuando Satanás quiere la guerra y el odio. Yo los invito de nuevo, hijitos: oren y ayunen para que Dios les dé la paz. Testimonien la paz a cada corazón y sean portadores de paz en este mundo sin paz. Yo estoy con ustedes e intercedo ante Dios por cada uno de ustedes. Y no teman, porque quien ora no teme el mal y no tiene odio en su corazón. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Los invito, aún hoy, a orar de todo corazón y a amarse los unos a los otros. Queridos hijos, habéis sido escogidos para testimoniar la paz y la alegría. Si no hay paz, orad y la recibiréis. A través de vosotros y de vuestra oración, hijitos, la paz comenzará a fluir en el mundo. Por eso, hijitos, orad, orad, orad; porque la oración hace maravillas en el corazón de los hombres y en el mundo. Yo estoy con vosotros y agradezco a Dios por cada uno de vosotros que ha aceptado con seriedad la oración y que la vive. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! En este tiempo de gracia los invito nuevamente a la oración. Hijitos, orad y preparad vuestros corazones para la venida del Rey de la Paz, a fin de que El, con su bendición, dé paz al mundo entero. La inquietud reina en los corazones y el odio rige el mundo. Por eso, vosotros que vivís mis mensajes, sed luz y manos extendidas hacia un mundo sin fe, para que todos conozcan el amor de Dios. No se olviden hijitos, que yo estoy con vosotros y los bendigo a todos. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Hoy los invito y los animo a la oración por la paz. Los invito especialmente hoy, trayéndoles en mis brazos a Jesús recién nacido, a unirse a El por la oraicón y llegar a ser un signo para este mundo turbado. Anímense los unos a los otros, hijitos, a la oración y al amor. Que vuestra fe sea para los otros, un estímulo para creer más y amar más. Los bendigo a todos y los invito a estar más cerca de mi Corazón y el Corazón del Niño Jesús. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!