Web address of the page: https://www.medjugorje.ws/es/messages/monthly/23 
www.medjugorje.ws » Mensajes de Medjugorje » Mensual Mensajes de Medjugorje » Mensual Mensajes de Medjugorje

Mensual Mensajes de Medjugorje

¡Queridos hijos! Hoy oro por vosotros y con vosotros para que el Espíritu Santo les ayude y aumente vuestra fe, para que acepten aún más los mensajes que les doy aquí, en este lugar santo. Hijtos, comprendan que éste es un tiempo de gracia para cada uno de vosotros, y conmigo, vosotros estáis seguros. Quiero conducirlos a todos por el camino de la santidad. Vivan mis mensajes y pongan en vida cada palabra que les doy. Que éstas les sean preciosas porque vienen del cielo. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Hoy los invito a poner la oración en el primer lugar de vuestra vida. Oren y que la oración, hijitos, sea gozo para ustedes. Yo estoy con ustedes e intercedo por todos ustedes, y ustedes hijitos, sean portadores gozosos de mis mensajes. Que vuestra vida conmigo sea alegría. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Alégrense conmigo en este tiempo de primavera, cuando toda la naturaleza se despierta y vuestros corazones anhelan un cambio. Abríos hijitos y orad. No se olviden que yo estoy con vosotros y que deseo conducirlos a todos a mi Hijo, para que El les haga el regalo de un amor sincero hacia Dios y hacia todo lo que viene de El. Abríos a la oración y pedid a Dios la conversión de vuestros corazones, y todo el resto, El lo ve y provee. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Hoy los invito a unirse a Jesús en la oración. Abridle vuestro corazón y dadle todo lo hay en él: alegría, tristeza y enfermedad. Que este tiempo sea para vosotros, un tiempo de gracia. Orad hijitos, y que cada instante sea de Jesús. Yo estoy con vosotros e intercedo por vosotros. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! En este tiempo de gracia les llamo para que lleguen a ser amigos de Jesús. Oren por la paz en vuestros corazones y trabajen por vuestra conversión personal. Hijitos, solamente así vosotros podréis llegar a ser testigos de la paz y del amor de Jesús en el mundo. Abránse a la oración para que la oración sea una necesidad para vosotros. Conviértanse hijitos, y trabajen para que muchas más almas conozcan a Jesús y Su amor. Yo estoy cerca de vosotros y os bendigo a todos. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! En este tiempo, mientras todavía tienen la mirada puesta en el año pasado, les llamo hijitos, a mirar profundamente vuestrto corazón y decidirse a estar más cerca de Dios y de la oracion. Hijitos, vosotros estáis todavía atados a las cosas terrenales y poco a la vida espiritual. Que mi llamado de hoy, sea también para vosotros, un estímulo para decidirse por Dios y por la conversión de cada día. Hijitos, ustedes no poden convertirse si no abandonan los pecados y si no se deciden por el amor hacia Dios y hacia el prójimo. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Hoy los invito y los animo a la oración por la paz. Los invito especialmente hoy, trayéndoles en mis brazos a Jesús recién nacido, a unirse a El por la oraicón y llegar a ser un signo para este mundo turbado. Anímense los unos a los otros, hijitos, a la oración y al amor. Que vuestra fe sea para los otros, un estímulo para creer más y amar más. Los bendigo a todos y los invito a estar más cerca de mi Corazón y el Corazón del Niño Jesús. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! En este tiempo de gracia los invito nuevamente a la oración. Hijitos, orad y preparad vuestros corazones para la venida del Rey de la Paz, a fin de que El, con su bendición, dé paz al mundo entero. La inquietud reina en los corazones y el odio rige el mundo. Por eso, vosotros que vivís mis mensajes, sed luz y manos extendidas hacia un mundo sin fe, para que todos conozcan el amor de Dios. No se olviden hijitos, que yo estoy con vosotros y los bendigo a todos. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Los invito, aún hoy, a orar de todo corazón y a amarse los unos a los otros. Queridos hijos, habéis sido escogidos para testimoniar la paz y la alegría. Si no hay paz, orad y la recibiréis. A través de vosotros y de vuestra oración, hijitos, la paz comenzará a fluir en el mundo. Por eso, hijitos, orad, orad, orad; porque la oración hace maravillas en el corazón de los hombres y en el mundo. Yo estoy con vosotros y agradezco a Dios por cada uno de vosotros que ha aceptado con seriedad la oración y que la vive. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! También hoy los invito a la oración, especialmente hoy cuando Satanás quiere la guerra y el odio. Yo los invito de nuevo, hijitos: oren y ayunen para que Dios les dé la paz. Testimonien la paz a cada corazón y sean portadores de paz en este mundo sin paz. Yo estoy con ustedes e intercedo ante Dios por cada uno de ustedes. Y no teman, porque quien ora no teme el mal y no tiene odio en su corazón. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! Hoy, los invito a todos a decidirse por la santidad. Que para ustedes, hijiitos, la santidad esté siempre en primer lugar en vuestros pensamientos, en toda situación, en vuestro trabajo y en vuestras palabras. Así, vosotros también la pondréis en práctica poco a poco; paso a paso la oración y la decisión por la santidad entrarán en vuestra familia. Sean verdaderos con vosotros mismos y no se aten a las cosas materiales, sino a Dios. Y no olviden, hijitos, que vuestra vida es pasajera como una flor. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
¡Queridos hijos! En este tiempo de gracia, los invito a acercarse aún más a Dios a través de vuestra oración personal. Aprovechen el tiempo de reposo y den a vuestra alma y a vuestros ojos reposo en Dios. Encuentren en la naturaleza la paz y descubrirán a Dios Creador, a quien podrán agradecer por todas las creaturas, y entonces encontrarán el gozo en vuestro corazón. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!