“Queridos hijos, Yo estoy con ustedes y deseo ayudarlos a todos ustedes en sus vidas para que al vivirlas, ustedes den testimonio de la Buena Nueva. Yo estoy aquí, queridos hijos, para ayudarlos y para conducirlos al Cielo y en el Cielo está el gozo, con el cual, ya desde ahora, ustedes pueden vivir el Cielo.”